Este catedrático emérito de la Universidad de Brest (Francia) imparte desde el pasado miércoles y hasta el próximo 29 de abril un ciclo de conferencias sobre la corteza oceánica actual y la fósil en la Facultad de Ciencia y Tecnología de la Universidad del País Vasco.
Según ha explicado en una entrevista con Efe, las "fumarolas negras" son erupciones de agua muy caliente (350 grados) que surgen a 3.000 metros debajo del mar en la cadena de volcanes que se llama dorsal oceánica mundial, una estructura que mide más de 60.000 kilómetros de largo y atraviesa todos los océanos.
Esas "fumarolas", descubiertas en la década de los setenta del siglo pasado, son de color negro y contienen partículas de sulfuros metálicos (hierro, cobre, plomo y manganeso, entre otros) que se depositan poco a poco y edifican yacimientos de metales que pueden llegar a acumular millones de toneladas.
Los científicos están investigando actualmente dichos yacimientos para hacer mapas y estimaciones de reservas con vistas al futuro, con la seguridad de que, según ha indicado, "el próximo siglo, cuando se agoten los yacimientos terrestres, iremos a buscar esos metales".
"El problema -ha destacado- es que están a dos o tres kilómetros en el fondo de mar y ni es fácil recogerlos ni existe la técnica para sacarlos a la superficie, pero ocurrirá con ellos como ocurrió con el petróleo: cuando sea necesario, se extraerá".
Juteau ha señalado que hoy día "hay compañías australianas y japonesas que ya piden permisos de investigación para empezar a localizar dónde están los yacimientos, evaluarlos y decidir si los explotan".
Además de los metales, el descubrimiento de las "fumarolas" también supuso el hallazgo de un ecosistema de animales "totalmente independiente de la luz del sol" y que resultaba "inesperado a esas profundidades".
Este investigador francés ha señalado que queda mucho por explorar y muchos ecosistemas por descubrir ya que la dorsal oceánica "es inmensa" y sólo se conocen unos cien puntos, que presentan los mismos organismos base, como los gusanos, los mejillones, las gambas o los pulpos de otros ecosistemas marinos, pero son diferentes en todo lo demás.
Noticia completa en Telecinco (España)