Un equipo de expertos del Pennington Biomedical Research Centre , de Louisiana cree que el adenovirus, altamente infeccioso, que puede contagiarse a través de la tos o las manos sucias, hace que se multipliquen las células adiposas, informa 20minutos.es.
Los científicos norteamericanos descubrieron que los pollos y ratones de laboratorio infectados por ese virus engordaban mucho más rápidamente que los animales no contagiados aunque ingiriesen la misma cantidad de comida.
Los estudios llevados a cabo en humanos indican que casi un tercio de los adultos obesos tienen ese virus frente a un 11% de los individuos que no sufren sobrepeso.
Sin embargo, según el doctor Ian Campbell, director médico de la organización contra la obesidad Weight Concern , un virus no puede ser razón suficiente para que tengamos una epidemia de obesidad.
Hay muchos otros factores- agregó- como el hecho de que ingerimos muchas más calorías de las que gastamos, o el llevar vidas sedentarias. No creo que nuestros hábitos dietéticos sean consecuencia de una infección vírica: todo es consecuencia de la expansión de las empresas que producen alimentos malsanos.
Noticia publicada en Times of Internet (EEUU)