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Una molécula previamente relacionada con la inflamación también ayuda a sellar el aislamiento vital que rodea los nervios periféricos, lo que la convierte en un blanco potencial de nuevos fármacos para controlar desórdenes nerviosos, dijeron el jueves científicos.

La última investigación sugiere que la molécula, conocida como JAM-C, podría jugar un papel clave en la regulación del funcionamiento de los nervios.

En ratones genéticamente modificados sin la molécula de adhesión, se deteriora la cubierta de aislamiento de mielina que protege los nervios y los animales experimentan una activación nerviosa deficiente y debilidad muscular, informaron los investigadores en la revista Science.

El equipo también halló que los nervios de los pacientes con ciertos desórdenes periféricos tenían JAM-C deficiente.

En conjunto, los resultados sugieren que la molécula es clave en la regulación de la estructura y el funcionamiento de los nervios periféricos y que su mal desempeño se debería a una serie de enfermedades.

La JAM-C, que fue descubierta recientemente, ya está siendo estudiada como blanco de nuevos medicamentos contra la inflamación y como un posible camino para combatir el cáncer, dado que parece ayudar a los tumores a formar nuevos vasos sanguíneos.

"Este hallazgo abre una nueva área en la que esta molécula debería ser investigada, pero estamos en una etapa muy temprana", dijo en una entrevista Sussan Nourshargh, profesora de Farmacología Microvascular de la Escuela de Medicina de Londres.

Nourshargh descubrió el papel de la molécula en los nervios periféricos por accidente, mientras investigaba los vasos sanguíneos.

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