Los investigadores llevaron a cabo dos experimentos: uno dentro de una campana de vidrio a modo de invernadero con la especie Nicotiana attenuata y el otro en condiciones externas con la especie Nicotiana longiflora. En cada una de las pruebas, las plantas se expusieron a dos tratamientos de radiación UV-B (uno normal y el otro a bajo nivel) durante tres semanas y luego se simuló un tratamiento herbívoro en las plantas con radiación a bajo nivel.
El tratamiento herbívoro se hizo sobre las dos hojas más jóvenes de cada planta, con incisiones en las dos caras y diluyendo en su interior larvas de insectos de oruga. Este proceso indujo respuestas de defensa equivalentes a las que ocasionan los insectos herbívoros reales.
Luego, las plantas se cosecharon para determinar el contenido de fenoles en sus hojas y cómo habían influido los tratamientos en cada una de las especies. Bajo las condiciones del experimento, el contenido de fenoles fue superior en la especie Nicotiana attenuata que en la Nicotiana longiflora. En cambio, los efectos simulados del tratamiento herbívoro y la radiación UV-B fueron similares en las dos especies.
Tanto los niveles mínimos como la magnitud de la respuesta de los fenoles inducidos por la radiación UV-B y la simulación herbívora, fueron mayores en la Nicotiana attenuata que en la Nicotiana longiflora. Si bien la comparación entre las especies es difícil de interpretar, los autores establecen que los valores máximos en ambas no mostraron cambios significativos. Los patrones de respuesta para las dos especies fueron similares para el flavonoide Rutina.
Los efectos de la simulación herbívora y la UV-B sobre la abundancia de compuestos fenólicos que absorben la radiación UV se compararon mediante análisis de correlación. La inducción de los compuestos mostró similares respuestas a la radiación UV-B y la simulación herbívora. En cambio, Rutina fue el único flavonoide que se acumuló en cantidades significativas en las pruebas y se presentó una clara respuesta a la radiación UV-B, escasa en cambio a la simulación herbívora.
Si bien los investigadores deben proseguir con sus estudios para obtener nuevas conclusiones, surge de su trabajo que los insectos elegirían a las plantas que no fueron afectadas por la radiación UV y que, ante vegetación que fue sometida a esa radiación, la actividad herbívora disminuye.
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