Las mujeres obesas albergan huevos más grandes en sus ovarios, lo que disminuye la probabilidad de desarrollar un embrión saludable, según concluye un estudio difundido hoy por investigadores australianos.
Para la ciencia era hace tiempo sabido que las mujeres con sobrepeso tienen más dificultades para concebir bebés, pero hasta ahora no se conocía exactamente la causa.
Cadence Minge, investigadora de la Universidad de Adelaida, descubrió que una proteína en las células que rodean y alimentan al huevo es el vínculo entre obesidad e infertilidad.
En experimentos con ratones, apuntó que la administración de la droga antidiabética rosiglitazona activaba esta proteína y ayudaba al huevo a madurar hasta convertirse en un embrión sano.
Sin embargo, la doctora Minge advirtió que la rosiglitazona, comercializada con el nombre Avandia, puede causar graves efectos secundarios y que aún es necesaria más investigación para encontrar formas alternativas de activar la proteína.
El estudio determinó que los huevos de ratones alimentados con una dieta alta en grasas se hacían resistentes a la insulina y prediabéticos, y no se convertían en embriones sanos. "Eran mucho más lentos para separarse y crecer, y la forma en que crecían las células también se alteraba", precisó.
La mejor manera para restaurar las probabilidades de concebir consiste en perder peso. Según la investigadora, una reducción de entre cinco y diez kilogramos es suficiente para activar la ovulación en mujeres obesas.
"Esperamos que nuestras conclusiones ayuden a las mujeres a considerar cuidadosamente el impacto de su estilo de vida en su propio futuro y el de sus hijos", dijo Minge. (DPA)
Noticiapublicada en La Gaceta (Argentina)