Al vivir por miles de años en aislamiento, el kakapo (strigops habroptilus) no desarrolló defensas contra los depredadores mamíferos que fueron introducidos por los exploradores europeos. Amediados de la década de los noventa sólo quedaban 51 de estos loros, sin embargo un intenso programa de conservación ha visto crecer la población de paulatinamente y con el nacimiento reciente de tres nuevos loros el número ha llegado a 86.
Los Kakapo son loros grandes, los machos pueden llegar a medir hasta 60 centímetros y pesar entre 3 y 4 kilogramos una vez alcanzada la madurez . Los kakapos no pueden volar, debido a que tienen unas alas pequeñas en relación a su tamaño y tiene pequeños huesos poco pronunciados. Los kakapo poseen plumas color verde musgo con negro en la parte posterior, que se camuflan muy bien con la vegetación de la zona, además tienen un sentido del olfato muy desarrollado el cual complementan con su estilo de vida nocturno.