Utilizando farmacogenómica tenemos una capacidad de predecir la respuesta al tratamiento en pacientes con Esclerosis Múltiple que se acerca al 90 por ciento de precisión. Se usan técnicas muy complejas que no están al alcance de todos los laboratorios y están aún en fase de experimentación, pero en uno o dos años será posible identificar de forma precisa si un paciente va a responder a un fármaco determinado, y esto nos va a permitir hacer tratamientos personalizados», señala el doctor Xavier Montalbán, director de la Unidad de Neuroinmunología del Hospital Vall dŽHebron, de Barcelona.
Este es uno de los avances que se han presentado en el 23 Congreso Europeo para el Tratamiento de la Esclerosis Múltiple, que tuvo lugar la semana pasada en Praga. En este encuentro internacional participaron unos 5.000 especialistas, y contó también con una importante representación Española.Un avance fundamental, en opinión de este experto, porque «ahora mismo, para constatar que un fármaco no funciona hemos de esperar un año como mínimo». Un tiempo crucial para disminuir la progresión de esta enfermedad autoinmune que provoca la desmielinización de las fibras nerviosas y puede llegar a ser incapacitante. En España la Esclerosis Múltiple afecta a unas 400.000 personas y es la patología crónica neurodegenerativa más frecuente en adultos jóvenes.
La mejora en el diagnóstico también está cambiando de forma importante el pronóstico de la enfermedad: «Hace unos años a los neurólogos nos daba igual decirle antes o después a un paciente que tenía Esclerosis Múltiple (EM) porque no teníamos ningún tratamiento que ofrecerle. Esperábamos a un segundo brote -podían pasar años- para confirmar el diagnóstico. Ahora esto ha cambiado radicalmente porque la mayoría de los tratamientos con inmunomoduladores que se utilizan son más eficaces en las primeras fases de la enfermedad, en lo que se denomina periodo ventana», explica otro de los participantes en el Congreso, el doctor Guillermo Izquierdo Ayuso, Jefe de la Unidad de Esclerosis Múltiple del Servicio de Neurolología del Hospital Virgen Macarena de Sevilla.
Tratamiento precoz
En la actualidad bastan tres meses para confirmar el diagnóstico. O incluso menos, matiza el doctor Montalbán: «Hemos presentado un trabajo en el congreso que demuestra que la primera resonancia magnética predice la enfermedad con una fiabilidad de más del 90% en el 40% de los pacientes».
Avances que permiten un tratamiento precoz que determina el curso de la enfermedad. como explica el doctor Izquierdo: «Porque los brotes sucesivos que se producen van dejando secuelas sobre las que los medicamentos actuales no tienen ningún efecto y además creemos que los pacientes tienen una degeneración de las fibras nerviosas independientemente de los síntomas».
La mayoría de las veces la esclerosis múltiple se manifiesta en forma de brotes que cursan con inflamación y degeneración de las fibras nerviosas. «Ahora mismo somos capaces de controlar la inflamación en un porcentaje enorme de pacientes utilizando el arsenal terapéutico que disponemos y el que tendremos próximamente. Queda por ver hasta qué punto la reducción de la inflamación mejora el curso degenerativo, pero parece que todos los datos indican que es así, lo que significa que estamos mejorando la historia natural de la enfermedad, algo que no había ocurrido en muchos años. Pero aún nos va a faltar algo muy importante: cómo recuperar la actividad nerviosa perdida», explica Montalbán. Algo quizá no tan lejano porque ya hay estudios, como el que se acaba de presentar en este congreso de la Clínica Mayo, que muestran que algunos anticuerpos monoclonales parecen tener capacidad para regenerar la mielina, la vaina que recubre las fibras nerviosas y facilita la transmisión de los impulsos nerviosos.
Montalbán confiesa tener grandes expectivativas respecto a un nuevo anticuerpo monoclonal con propiedades regenerativas dirigido contra una molécula denominada «Lingo-1», que repara la desmielinización fisiológica que todos sufrimos tras una infección como la gripe y que en la esclerosis múltiple parece funcionar de forma incorrecta. «Este anticuerpo produce en animales de experimentación una remielinización muy importante que no se ha conseguido hasta ahora con ninguna otra terapia».
En su opinión otro avance relevante es «la presentación de nuevos datos sobre anticuerpos monoclonales, especialmente el denominado daclizumab que ha demostrado por primera vez que puede reducir en más de un 70 por ciento actividad clínica en pacientes que no hasta ahora respondían a otros medicamentos». Y es que, señala este experto estamos atravesando una nueva frontera terapéutica, en la que los fármacos van dirigidos a bloquear una molécula muy concreta -el receptor de la Interleuquina-2 (IL-2)- a diferencia de los interferones, la primera generación de fármacos para la EM, que tienen efectos mucho más inespecíficos y más generales».
Montalbán señala que el estudio multicéntrico que él ha coordinado, llevado a cabo con un total de 230 pacientes de 51 centros Estados Unidos, Canadá y Europa, ha demostrado que este anticuerpo monoclonal tiene además un efecto muy rápido y reduce la actividad inflamatoria en un mes».
Diagnóstico
Los prometedores resultados con estos fármacos auguran un nuevo punto de inflexión en el tratamiento de la esclerosis múltiple, en opinión de Rafael Arroyo González, jefe de la Unidad de Esclerosis Múltiple del Hospital Clínico San Carlos de Madrid. No obstante, este experto advierte de que «a pesar de ser cada vez más específicos, esta nueva generación de fármacos tiene unos efectos adversos que habrá que medir muy bien». Añade que se están desarrollando fármacos por vía oral que serán una alternativa más cómoda a los inyectables.
La Tomografía de Coherencia Óptica (OCT), una especie de escáner para ojos, también podría mejorar el diagnóstico. Se trata de una técnica ya empleada en oftalmología que permite valorar la progresión de la enfermedad.
Publicado originalmente en Hoy (España)