Nueva Zelanda se levantó con un fuerte sismo de 7,2 grados de magnitud en la escala de Richter. Según información del Servicio Geológico de Estados Unidos, el terremoto se produjo a las 04:35 de la madrugada del sábado del país neozelandés.
El epicentro del sismo se ubicó a 30 kilómetros al noroeste de Christcurch (190 kilómetros al sureste de Westport). Por ahora no se ha dado aviso de tsunami ni dio cuenta de daños o víctimas.
El Centro de Alertas de Tsunami del Pacífico del servicio oceanográfico estadounidense (NOAA) indicó por su parte que, en base a los datos históricos, no existe una “amenaza de un amplio tsunami destructivo” tras el terremoto.
Con todo, advirtió que sismos de esta magnitud a veces generan tsunamis locales que “pueden ser destructivos a lo largo de costas situadas en un radio de cien kilómetros del epicentro”, por lo que aconsejó a las autoridades locales tener en cuenta esta posibilidad y “adoptar las medidas adecuadas”.
Sin electricidad
La fuerte sacudida ha dejado sin electricidad zonas de la Christchurch, la segunda mayor ciudad del país y habitada por unas 380.000 personas, según diferentes versiones de residentes citadas por Radio Nueva Zelanda.
Tras el primer temblor se sucedieron varias réplicas y las autoridades ordenaron evacuar el aeropuerto de Chrischurch, que registró daños menores.
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