En principio, la primera fase del estudio de seguridad del compuesto determinó que era altamente eficaz en el bloqueo de la proteína NS5A, lo que podría proveer un arma más contra un virus que puede desarrollar resistencia rápidamente.
"Al igual que en el tratamiento del VIH, se estima que se necesitaría una combinación de al menos tres medicamentos para evitar la aparición de resistencia", dijo Nicholas Meanwell, de Bristol-Myers Squibb, quien trabajó en el estudio publicado en la revista Nature. "Estamos apuntando a una proteína diferente. Esto proporcionará un perfil único de resistencia", dijo Meanwell en una entrevista telefónica.
La hepatitis daña el hígado, causando problemas hepáticos crónicos, cáncer de hígado, cirrosis y la muerte. La enfermedad es la principal causa de males hepáticos en todo el mundo y afecta a unas 3,2 millones de personas sólo en Estados Unidos y a 170 millones en todo el mundo.
El tratamiento puede incluir 52 semanas de interferón más la droga antiviral ribavirina. La combinación funciona sólo en aproximadamente la mitad de los pacientes y algunos desarrollan complicados efectos secundarios.
El compuesto de Bristol-Myers funciona en forma diferente que una nueva clase de drogas llamadas inhibidoras de la proteasa, desarrolladas por la división de Merck Schering-Plough y Vertex Pharmaceuticals Inc.
Supresión de la carga viral
Meanwell dijo que el BMS-790052 ayuda a evitar que el virus de la hepatitis C se multiplique. La carga viral de los pacientes infectados que recibieron una sóla dosis de 100 miligramos del compuesto cayó más de 99,9 por ciento.
Los primeros resultados de la segunda fase del estudio presentados la semana pasada en la Asociación Europea para el Estudio del Hígado en Viena fueron también prometedores.
Siete de cada ocho pacientes que recibieron la dosis más elevada de la droga tenían niveles indetectables del virus. El octavo paciente dejó de tomar el medicamento por un tiempo. "Tiene una potencia y efectividad en una sola dosis que no se iguala con ninguna otra cosa", dijo Meanwell.
Agregó que los resultados son preliminares, pero la esperanza es que el compuesto pueda ser usado en un cóctel de drogas para evitar que el virus desarrolle resistencia en los pacientes el tiempo suficiente para acabar con la enfermedad. "Los datos que hemos visto hasta ahora son muy alentadores", aseguró.
Los nuevos tratamientos para la hepatitis C han llamado la atención de Wall Street. El tratamiento experimental de Vertex Pharmaceuticals contra la hepatitis C telaprevir, que se espera tenga resultados de la fase III en el tercer trimestre de este año, tendría ventas estimadas por 3.900 millones de dólares en el 2013 si es aprobado en Estados Unidos en el primer semestre del 2011.
Noticia publicada en Público (España)