En uno de los nidos se encontró a un polluelo recién eclosionado, señala el diario El Universo, que recordó que en julio pasado se informó del hallazgo de un polluelo de petrel en la zona el Infiernillo, en la isla Isabela.
El petrel de Galápagos (Pterodroma phaeopygia) es una de las seis aves marinas endémicas del archipiélago, que anida en las zonas altas de las islas Santa Cruz, Santiago, San Cristóbal, Floreana y ahora también en Isabela, la más grande del archipiélago. Para ello utiliza agujeros de lava volcánica ubicados entre la vegetación. Viven en pareja y cada año regresan al mismo nido para colocar un único huevo.
El petrel de Galápagos es considerado una especie en peligro de extinción, según una "lista roja" de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), aunque el PNG destacó las medidas que ha adoptado en los últimos años para la reproducción exitosa de ese tipo de ave.
Las Islas Galápagos, situadas en el océano Pacífico unos mil kilómetros al oeste de las costas continentales de Ecuador, deben su nombre a las grandes tortugas que la habitan. Sus reservas terrestre y marina contienen una rica biodiversidad, considerada como un laboratorio natural, que permitió al científico británico Charles Darwin desarrollar su teoría sobre la evolución y la selección natural de las especies.
Las islas Galápagos fueron catalogadas en 1978 como Patrimonio Natural de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), una institución que ahora ha incluido al archipiélago en la lista de patrimonio en peligro.
Noticia publicada en Radio Sucre (Ecuador)