Las indeseadas proliferaciones del alga Cladophora que se dan en el Báltico y otras partes del mundo tienen un lado positivo. Un grupo de investigadores del Laboratorio Ångström en la Universidad de Uppsala, Suecia, han descubierto que la nanoestructura de celulosa distintiva de estas algas puede servir como un efectivo sustrato de cobertura para ser usado en baterías ambientalmente amigables. Estos hallazgos han sido publicados en un artículo en Nano Letters.
“Estas algas tienen una especial estructura de celulosa caracterizado por una muy larga superficie” dijo Gustav Nyström, un estudiante de doctorado en nanotecnología y principal autor del artículo. “Mediante la cobertura de esta estructura con una capa delgada de un polímero conductor, tuvimos éxito en producir una batería que pesa casi nada y que estableció un nuevo tiempo de carga”.
A pesar de los extensos esfuerzos en los últimos años por desarrollar un sustrato de cobertura basado en la celulosa para aplicaciones en baterías, fue difícil obtener una performance de carga satisfactoria. Sin embargo, nadie trato de usar la celulosa de las algas.
El investigador Albert Mihranyan y la profesora Maria Strømme de la Nanotechnology and Functional Materials Department of Engineering Sciences en el Laboratorio Ångström vienen investigando las aplicaciones farmacéuticas de la celulosa del alga Cladophora, la misma que es completamente diferente de la celulosa de las plantas terrestres, que han mostrado funcionar bien como un agente espesante de las preparaciones farmacéuticas y en comidas. Según el portal AquaHoy, la posibilidad de aplicaciones en el almacenamiento de energía fue evaluada debido a su gran área superficial.
“Esperábamos encontrar algún uso adecuado para el material de las proliferaciones algales y hemos demostrado que es posible” expresó Maria Strømme, Profesor in Nanotecnología y líder del grupo de investigación. “La investigación en baterías tiene un genuino carácter interdisciplinario y fue iniciado en colaboración con el profesor de química Leif Nyholm.
Los expertos en celulosa farmacéutica, química de baterías y nanotecnología han jugado roles esenciales en el desarrollo del nuevo material”.
El artículo en Nano Letters introduce todo un nuevo material de electrodo para aplicaciones en el almacenamiento de energía, que consiste en nanoestructura de celulosa algal cubierta con una capa de 50 nm de “polypyrrole”. Las baterías basadas en este material pueden almacenar hasta 600 mA por cm3, con solo 6% de perdida en 100 ciclos de cargas.
“Esto crea nuevas posibilidades para la producción a gran escala de sistemas de almacenamiento de energía ambientalmente amigables, rentables y de peso ligero” destacó Maria Strømme.
“Nuestro éxito en obtener una mayor capacidad de carga con baterías basados en polímeros avanzados se debe principalmente a la extrema delgadez de la capa del polímero” informó Gustav Nyström.
Noticia publicada en Mundo Acuícola (Chile)