La cuarta expedición para identificar la ciudad submarina de Los Caras rompe la monotonía de Bahía. Desde el 26 de mayo, ocho buzos, arqueólogos del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), historiadores de Bahía, personal del Municipio local y medios de comunicación nacional se unieron al promotor turístico Patricio Tamariz.
En esta misión, Tamariz invitó al arqueólogo estadounidense Johan Reinhard, quien además es explorador residente de la National Geographic Society. Tres inmersiones dan como resultado que hay vestigios de construcciones en el accidente geográfico del bajo de Punta Napo.
Con la ayuda de equipos de Sistema de Posicionamiento Satelital (GPS), los buzos fueron en busca de más elementos que ratifiquen la versión de Tamariz de que allí estuvo el asentamiento precolombino de Los Caras.
Según el experto estadounidense, hay muchas incógnitas por descubrir en el bajo Punta Napo, donde al parecer en el fondo del mar estaría lo que fue una ciudad en otro tiempo.
Tamariz está convencido de que hay una ciudad bajo el agua. En sus 31 años de seguimiento, desde 1978 hasta la fecha con tres expediciones anteriores, la tesis de que la milenaria ciudad yace en ese lugar estaría más cerca de comprobarse.
Existe una doble pared de 70 metros de largo. Además, hay muros y los pescadores locales dicen haber encontrado en sus redes artículos de piedra. Al final de la expedición, Reinhard concluyó que en las estructuras ubicadas en el Bajo de Santa Martha pudo haber actividad humana. Además, comentó que los muros son elementos extraordinarios que posiblemente pueden ser paredes de viviendas.
Una de las tesis que manejan los expertos es que el bajo de Santa Martha sería una extensión de Punta Napo, un accidente geográfico ubicado al noroeste del cantón San Vicente.
Para Tamariz, sus esfuerzos por demostrar que la ciudad de Los Caras existió lo hacen remitirse incluso a hechos históricos precolombinos. La ciudad, al parecer, se perdió después de un cataclismo, el hecho podría ser producto de un maremoto cuyo epicentro al parecer fue al norte de las costas de Perú.
En la última inmersión a la zona de estudio, los ocho buzos que colaboran en el proyecto extrajeron del fondo marino una roca en forma de círculo. La pieza será analizada en Bahía junto a otras que fueron sacadas en misiones anteriores.
Noticia publicada en El Comercio (Ecuador)