El déjà vu, hace muchos años, se relacionaba con perturbaciones paranomales de trastornos mentales. Sin embargo, en los últimos años, diferentes científicos se han lanzado en el estudio de este fenómeno, cuyos resultados sugieren que el déjà vu no es simplemente una interferencia en el sistema de memoria de nuestro cerebro. En el último número de la revista Current Directions in Psychological Science, la publicación de la Asociación de la Ciencia Psicológica, se ha publicado un reportaje con nuevas conclusiones sobre este fenómeno, mostrando las muchas similitudes que existen entre el déjà vu y nuestro entendimiento del reconocimiento de la memoria.
Anne M. Cleary llevó a cabo unos experimentos basados en la familiaridad del reconocimiento. A los voluntarios se les dio una lista con nombres de celebridades. Más tarde se les mostró una colección de fotografías, algunas de ellas coincidían con la lista y otras no. Los participantes tenían que relacionar las fotografías con la lista, y los resultados fueron sorprendentes. Incluso cuando no podían identificar a la celebridad por la fotografía, tenían una sensación de haber visto el nombre, o no, del personaje de la fotografía. Cleary repitió el experimento con lugares famosos y los resultados fueron similares. Al igual que un posterior experimento con una lista aleatoria de palabras.
Estos resultados apoyan la idea de que los acontecimientos y episodios de nuestras experiencias se almacenan en nuestra memoria como elementos o fragmentos individuales. El déjà vu puede ocurrir cuando unos aspectos concretos de una situación actual se asemejan a ciertos aspectos de acontecimientos anteriores, que puede producir un fuerte sentimiento de familiaridad. Cleary llega a la conclusión de que “existen muchos paralelismos entre las explicaciones del déjà vu y las teorías de reconocimiento de la memoria humana”.
Noticia publicada en DMedicina (España)