Científicos pertenecientes a un consorcio apoyado por la Unión Europea han descubierto la mutación de un gen humano que origina una dependencia de la nicotina. Han demostrado que una mutación particular de un gen receptor de la nicotina tiene una incidencia en los hábitos de consumo de tabaco provocando un incremento, en un 30 por ciento, del riesgo de padecer cáncer de pulmón y, en un 20 por ciento, los riesgos de enfermedad arterial periférica, constricción común de las arterias de las piernas.
Aproximadamente la mitad de la población de ascendencia europea porta esta variante genética, que no tiene incidencia en el inicio del hábito de fumar, pero que hace más difícil dejarlo. Estos resultados proceden del proyecto europeo GENADDICT (genómica, mecanismos y tratamiento de la dependencia) que recibe financiación por un valor de 8,1 millones de euros procedente del sexto programa marco de investigación de la Unión Europea y Estados Unidos.
"Este avance se debe no solo a la competencia y dedicación de los investigadores europeos, sino también a la intensificación de la cooperación entre los científicos europeos. La Unión Europea lleva apoyando la investigación en el campo de la sanidad desde hace más de veinte años y ahora comprobamos claramente los beneficios derivados de esta colaboración", ha declarado Janez Potocnik, miembro de la Comisión responsable de la ciencia y la investigación.
Noticia publicada en Diario de Mallorca (España)