¿Se ha preguntado por qué en esta época navideña, donde todo está lleno de fiesta y de alegría, se incrementa la depresión y por lo tanto las consultas al sicólogo y el uso de antidepresivos?
Para el doctor en Sicología, José de Jesús González Núñez, esta temporada es de contradicciones, por un lado se recuerda el nacimiento de Jesús, pero también la muerte.
Algunas personas asocian esta época con situaciones tristes; recuerdan a seres queridos ya muertos o hacen un balance de lo que lograron y las metas que no realizaron en este año, lo que ocasiona una baja en la autoestima, reflexiona el también presidente del Instituto de Investigación en Psicología Clínica y Social (IIPCS).
Estos sentimientos de pérdida propician depresión, mal que afecta tanto a hombres como a mujeres; no obstante, como ellos regularmente no exteriorizan sus emociones, son más propensos a suicidarse.
Los jóvenes, se suicidan inconsciente
En el caso de los jóvenes hay un agravante adicional: el alcohol, pues este se convierte en un depresor de la personalidad, por ello no toman conciencia de que se quieren suicidar y sin embargo, lo hacen.
Se ha comprobado que sábados, domingos y lunes se incrementa el número de accidentes entre esta población a causa de las bebidas embriagantes, las cuales los ponen eufóricos momentáneamente, pero modifican su estado anímico, situación que los lleva a cometer actos de imprudencia. "Los accidentes no son más que suicidios, aunque legalmente se consideren como percances", refiere el sicoterapeuta.
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