Investigadores del INAH comenzarán la próxima semana la inspección, registro y levantamiento de materiales arqueológicos hallados en la Cueva de San Felipe en Puxcatán, municipio de Tacotalpa, Tabasco, donde se presupone pudo haber rituales de autosacrificio.
Luis Alberto Martos López, director de Estudios Arqueológicos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) informó que además del trabajo de exploración completa de la cueva, se llevará a cabo el levantamiento topográfico de la misma, la localización de los depósitos de materiales y el análisis de los materiales cerámicos y líticos.
"No vamos a levantar todo, sólo se van a tomar algunas muestras de materiales óseos que sean importantes y pensamos rescatar los objetos sobresalientes. De hecho, hay muchos depósitos fosilizados, lo que habla de un largo periodo de uso de la cueva, otra de las incógnitas es desde cuándo comenzó a ser utilizada", agregó.
Explicó que en asociación a los restos óseos se han hallado gran número de ofrendas compuestas por vasijas, pectorales de concha; cuentas de concha y de jade; hachuelas de piedra verde, bolas de cinabrio y orejeras. En su mayoría se trata de ornamentos, la cerámica se localizó en menor abundancia.
Una selección de estos elementos será la que conforme una pequeña muestra que se espera puede ser vista en los primeros meses de 2008 en el Palacio Municipal de Tacotalpa.
En la cueva, refirió, hay cerca de 10 depósitos mortuorios, la mayoría de ellos son entierros secundarios con numerosos individuos.
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