"No queremos que haya ninguna víctima en Papandayan", dijo Surono, experto del servicio de Vulcanología local, que confirmó que el gas que expulsa contiene ácido sulfúrico, informó a la agencia estatal de noticias Antara.
Los vecinos y guías turísticos han sido advertidos de no acercarse a los cráteres de este volcán de 2.665 metros de altura, uno de los más activos de los más de 400 que tiene Indonesia y que permanece en situación de alerta desde la semana pasada.
Según explicó Surono, el Papandayan, situado a unos 175 kilómetros al sureste de Yakarta, ha incrementado su actividad en los últimos días, aunque se descarta una erupción inminente.
Seis "boy scouts" de entre 14 y 16 años fallecieron el mes pasado y dos enfermaron de gravedad por inhalar gases venenosos en los alrededores del volcán Salak, también en Java.
Según un estudio de la Agencia Geológica de Indonesia, cada año pueden ocurrir en el país hasta cinco erupciones.
En este momento, está declarada alerta, además de en el Papandayan, en el Soputan, en el norte de las islas Célebes, y en el Merapi, en Yogyakarta (centro de Java).
Noticia en Terra (España)