John Maynard Keynes decía que las ideas son más poderosas que lo que la gente cree. Para fortalecer el argumento, Keynes agregaba que la mayoría de las propuestas de los políticos son esclavas de las ideas de algún economista muerto.
El aforismo de Keynes se cumple a la perfección en el caso de Milton Friedman, quien falleció el pasado noviembre, y este miércoles habría cumplido 95 años.Sin lugar a dudas, Friedman es el economista más influyente en la segunda mitad del siglo pasado. Sus ideas siguen moldeando la discusión de política económica y han afectado positivamente a la vida de ciento de millones de personas.
Friedman ganó en 1976 el premio Nobel de economía por su aporte a la teoría económica en áreas tan diversas como la teoría del consumo, la metodología de la ciencia,la relevancia del dinero en los ciclos económicos o las bondades de los tipos de cambio libre.
En el campo de la economía política, su mayor logro fue imponerse a la hegemonía macroeconómica del keynesianismo. Gracias a Friedman hoy entendemos que la política monetaria es crucial para controlar la inflación y las recesiones.
Pero el aporte fundamental de Friedman fue su defensa de la libertad individual como la piedra angular de toda sociedad. Lo recordamos por su convicción de que la libertad económica es un requisito para la libertad política, que el libre mercado es la forma más eficiente para organizar la sociedad y que el mejor gobierno es el menor gobierno.
Así, Friedman fue el primero en argumentar que el servicio militar obligatorio es un impuesto altamente regresivo e ineficiente.También fue pionero en proponer los planes privados de pensiones (los llamados "de capitalización") en reemplazo de los de sistema de reparto de las pensiones gubernamentales.Esta propuesta da la libertad a los individuos de escoger cuánto y cómo ahorrar para su retiro y, además, evita los problemas de insolvencia debidos a cambios demográficos.
Friedman también propuso el cheque escolar como forma de subvención estatal a la educación porque, decía, son las familias y no el Estado los responsables de la educación de sus hijos. El cheque escolar permite a las familias elegir el colegio -privado o público- que más les convenga de acuerdo a sus preferencias educacionales, religiosas...
Por si esto fuera poco, Friedman fue además pionero en proponer una tasa única de impuesto sobre la renta.Sus cálculos demostraban que en EE.UU. una tasa única del 23% lograría la misma recaudación que un sistema con tasas marginales del 90%.
Es por esto que este miércoles, en diversos lugares del mundo, hemos celebrado el legado del Friedman.Hemos recordado su defensa de la libertad en una época en que los economistas se atropellaban por buscar nuevasformas de intervencionismo estatal.
Gracias a la capacidad y fuerza intelectual de Friedman, el discurso ha cambiado en este siglo.Hoy la discusión se centra en la expansión de la libertad económica y de los mercados.Y por esto es que tenemos una inmensa deuda de gratitud con él.
Publicado originalmente en Expansión y Empleo