Desde hace más de 30 años, ningún fármaco había logrado mejorar el pronóstico de los pacientes con cáncer de hígado avanzado. Por eso, aunque sólo logre prolongar la supervivencia tres meses, los resultados de un nuevo fármaco, sorafenib, presentados en la reunión anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO) parecen esperanzadores.
El doctor Josep Llovet, especialista del Hospital Monte Sinaí de Nueva York y del Hospital Clínic de Barcelona, ha sido el encargado de presentar en Chicago los resultados de esta iniciativa internacional en la que han participado 121 centros de 21 países de todo el mundo (desde Europa hasta Nueva Zelanda, Australia, EEUU o Sudamérica).
"Después de más de 100 ensayos clínicos en los que se había probado la eficacia de fármacos tan distintos como el interferon, el cisplatino, la doxorrubicina, la hormonoterapia..., sorafenib es el primero en lograr prolongar la supervivencia de los pacientes con hepatocarcinoma avanzado", explica el investigador a elmundo.es.
Según los datos del ensayo, llevado a cabo con 602 pacientes, esta pastilla que se toma por vía oral logró prolongar la supervivencia hasta los 10,7 meses frente a los 7,9 del grupo control, que fue tratado únicamente con placebo.
"Más allá de la diferencia de los tres meses", destaca el científico español, "la importancia de estos resultados radica en el porcentaje que representa sobre la vida de estos pacientes; es decir, sorafenib aumenta un 44 por cientosus expectativas con respecto a lo que les tocaría si no hubiesen recibido nada". De hecho, añade, es posible que el impacto de este tratamiento sea mayor en fases menos avanzadas del cáncer de hígado. Por este motivo, el siguiente paso deberá ser evaluar la acción de sorafenib en este escenario.
El tratamiento estándar para el cáncer hepático contempla actualmente la cirugía, la radioterapia o la quimioterapia administrada directamente en el hígado, a pesar de lo cual se calcula que el 70 por cientode los pacientes recae en el plazo de los cinco años.
Además, hasta el 40 por cientode los pacientes (hasta el 80% en algunos países en desarrollo) se diagnostican en fases más agresivas de la enfermedad, en las que hasta ahora no existía ningún tratamiento posible.
Noticia publicada en Territorio Digital (Argentina)