Así se desprende del trabajo publicado en "Nature Genetics" realizado en la Universidad de Lovaina (Bélgica) en el que colaboran científicos del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de la Universidad de Navarra, cuyos resultados se basan en el análisis de 134 pacientes y "podrían conducir a una nueva terapia para la enfermedad", según una nota de este centro universitario.
Según la investigadora del CIMA y coautora de la publicación María Dolores Odero, la leucemia linfoblástica aguda de células T supone el 15 por ciento de todas las leucemias agudas, de forma que "la transformación leucémica de las células T es causada por la cooperación de distintas mutaciones genéticas. Nuestros resultados demuestran que la duplicación de MYB es relevante en este tipo de leucemia y, por tanto, este gen podría ser una diana terapéutica".
Actualmente el tratamiento para estos pacientes es la quimioterapia, aunque se estudia la inhibición del NOTCH1, otro oncogén con un papel importante en esta leucemia, "pero el tratamiento tiene efectos secundarios tóxicos, por lo que en algunos pacientes debe interrumpirse".
Los resultados publicados en Nature Genetics demuestran que la inhibición combinada de NOTCH1 y MYB en este tipo de leucemia "es muy efectiva", por lo que "estas conclusiones arrojan esperanza para el desarrollo de una combinación de terapias más efectivas y menos tóxicas".
Noticia publicada en Terra (España)