La imagen en cuestión presenta lo que parece ser un cráneo con rasgos humanoides sobre la superficie marciana, la fotografía se halla alojada en el website de la NASA. ¿Reconoces el cráneo en la imagen? pues más te vale que sí o realmente hay algo malo contigo.
La imagen corresponde a la desierta superficie rocosa de Marte con pequeñas dunas y depósitos de polvo. El "cráneo" en realidad es una roca marciana común con una forma que reconoceríamos inmediatamente, y la reconocemos porque nuestro cerebro está preparado para ello.
El cerebro humano posee una capacidad para reconocer rostros y objetos que podríamos hallar en la naturaleza, tal capacidad fue y continua siendo necesaria para determinar los incentivos positivos y negativos del ambiente. Reconocer un depredador entre los árboles, una fruta madura, un semejante enfermo o un rostro familiar era nuestro pasado evolutivo para evitar peligros y lograr la subsistencia diaria.
Hoy en día con la evolución y selección social a cuestas aún es necesario uno de los aspectos vitales del reconocimiento de objetos: la percepción de rostros, tal capacidad nos permite reconocer rostros familiares, gestos de aprobación o reprobación, estados de ánimo, síntomas de enfermedades, la simetría de un rostro (belleza) prueba de salud y buenos genes; toda esta, información valiosa para determinar el curso de nuestras relaciones con otras personas, para cooperar para conseguir objetivos comunes o abstenerce de hacerlo.
En nuestra evolución en las sabanas del África hace cientos de miles de años, se volvió importante reconocer restos óseos de otros seres humanos para determinar si la región en la que la tropa se movía era segura. El horror que nos sigue produciendo encontrar un cráneo humano, fue vital entonces para evitar las áreas de sequía donde faltaban alimentos o lugares donde los predadores se encontraban presentes, permitiendo a nuestros ancestros sobrevivir evitando diversos peligros.
En cuanto al "cráneo marciano", no es más que una roca común en la inmensidad del paisaje que accidentalmente la geología le dió una forma reconocible.