Los pacientes higienizados con la bacteria probiótica denominada «Lactobacillus plantarum 299» evitaron las infecciones de forma tan efectiva como aquellos en los que se utilizó el antiséptico clorhexidina, dicen los autores en la revista Critical Care. Ambos enfoques funcionaron igual de bien a la hora de prevenir la neumonía en 50 pacientes en estado crítico asistidos con ventilación, reveló el equipo de Bengt Klarin, del Hospital de Lund (Suecia).
La neumonía asociada a la ventilación mecánica es común, dado que los pacientes aspiran gérmenes a través del equipo, y frecuentemente se trata de bacterias que formaron láminas resistentes a los medicamentos llamadas «biofilms».
El equipo analizó la idea de que las bacterias probióticas podrían contrarrestar la acción de las patogénicas. La mitad de los pacientes fueron higienizados con clorhexidina, como es habitual, y la otra mitad recibió en cambio el «L. plantarum 299». «Hipotetizamos que higienizar la boca con probióticos sería un método efectivo para disminuir los microorganismos patogénicos orales en los pacientes críticamente enfermos que están intubados y mecánicamente ventilados», indicó Klarin. Los autores concluyen que la bacteria probiótica «Lp299» es un agente seguro y viable para el cuidado bucal; «L. plantarum» se halla normalmente en la saliva y en alimentos en escabeche.
Las mujeres con más bacterias
Las palmas de las manos contienen cien veces más bacterias de lo que se suponía, señalan los científicos de la Universidad de Colorado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences. Y añaden que las manos de las mujeres tienen toda una civilización de gérmenes en comparación con las de los hombres. La información podría permitir a los científicos averiguar cuál es el nivel saludable de bacterias, diagnosticar enfermedades con mayor precisión, e incluso tal vez saber por anticipado si algo anda mal.
Los microbios son una de las últimas fronteras para la exploración humana. De hecho, los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de los EE.UU., han iniciado el proyecto del «Microbioma Humano» con el objetivo de mapear la microbiota humana, que se desconoce actualmente en su mayoría. Probablemente conocemos solo el 1% de las bacterias del mundo.
La piel, sobre todo en las palmas de las manos, alberga prósperas comunidades bacterianas. Para conocer la flora que reside en el lugar, los investigadores escudriñaron las palmas de 51 estudiantes en busca de bacterias, justo después de que los estudiantes terminaran sus exámenes académicos. Una muestra del ADN completo de los microbios (lo que se conoce como metagenómica) reveló más de 332.000 secuencias genéticas, alrededor de cien veces más de lo que se había encontrado anteriormente en las bacterias cutáneas.
En promedio, cada mano albergaba unas 150 especies diferentes de bacterias. En total, más de 4,700 especies fueron identificadas en todas las manos, de las cuales apenas cinco eran comunes entre todos los voluntarios. Solo el 17% de los tipos de bacteria eran compartidas entre las palmas derecha e izquierda, mientras que los voluntarios apenas compartían el 13 % de las especies de bacterias entre sí, probablemente debido a condiciones ambientales como la producción de aceite, la resequedad de la piel, y las superficies que la mano hubiera tocado anteriormente.
Las bacterias de la piel de la mano eran más diversas que las encontradas en los antebrazos o codos, o de hecho en cualquier otra parte del cuerpo, incluso la boca y los intestinos. Las mujeres tenían una mayor diversidad de gérmenes que los hombres, posiblemente debido a diferencias en la acidez de las manos, distintos regímenes de lavado de manos, diferencias en la producción de sudor, variaciones hormonales y la frecuencia del uso de humectantes o cosméticos.
En general, lavarse las manos no pareció afectar la diversidad de bacterias (aunque sigue siendo una buena práctica). Las bacterias volvían rápidamente tras el lavado de manos (al menos con el tipo de lavado de manos practicado por estos voluntarios), luego lavarse las manos simplemente no elimina las bacterias.
Publicado originalmente en Levante Emv (España)